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Cómo eliminar el óxido

Date: 19 julio 2022 | Category: How to…

Eliminar el óxido de las piezas metálicas mecánicas y protegerlas de la acumulación de óxido es una operación común y muy necesaria en todas las industrias. Ayuda a mantener la vida útil de los equipos y la maquinaria, y favorece la durabilidad y la plena funcionalidad.

Existen muchas soluciones para desoxidar las piezas metálicas, utilizando tanto procesos químicos como mecánicos, pero a menudo requieren mucho tiempo, corren el riesgo de dañar las superficies que se limpian del óxido, pueden dañar el medio ambiente y conllevan importantes complicaciones de salud y seguridad. Los servicios de limpieza de piezas de Safetykleen ofrecen formas seguras, eficaces y eficientes de eliminar el óxido de las piezas metálicas.

¿Cómo se forma el óxido?

El óxido se forma como resultado de un lento proceso químico llamado reacción de oxidación-reducción. Cuando la molécula de hierro, ya sea hierro puro o una aleación a base de hierro como el acero, se expone al oxígeno y al agua (ambos presentes en el aire), reacciona para formar un compuesto de color marrón anaranjado llamado óxido de hierro (III) hidratado.

Condiciones que aumentan la oxidación

  • La proximidad al agua salada (porque la sal acelera el proceso de oxidación)
  • Entornos con alto contenido de oxígeno
  • Superficies expuestas y no tratadas

En cuanto comienza la oxidación, corroe el metal, recubre su superficie de óxido y cambia su aspecto. Este proceso no se limita a la oxidación del hierro. El cobre se vuelve naranja y luego verde durante la oxidación, el plomo puede volverse azul/verde, e incluso el aluminio se vuelve blanco. Si no se controla, la oxidación se extiende gradualmente, debilitando el metal hasta que se perfora y se desmorona.

¿Por qué eliminar el óxido de las piezas metálicas?

The consequences of rust forming on metal parts are significant in all industries.

Las piezas mecánicas que se hinchan o se vuelven más frágiles debido a la oxidación pueden, bajo la presión de los procesos de producción, alcanzar fácilmente el punto de ruptura y provocar paradas en las líneas de producción o averías en los vehículos. Esto puede acarrear importantes costes de intervención, así como pérdidas de producción y situaciones de riesgo para la seguridad de los operarios.

Una de las consecuencias de la oxidación para las empresas puede ser el consumo excesivo de productos de hierro y acero: más del 15% de la producción de acero sirve únicamente para sustituir piezas dañadas por la oxidación, con un coste considerable en términos de compra y almacenamiento.

Las consecuencias sobre el medio ambiente también son considerables en cuanto a la generación de residuos de piezas metálicas excesivamente dañadas que son muy difíciles de reciclar o reutilizar.

La aplicación de métodos eficaces de eliminación del óxido como parte del mantenimiento preventivo, junto con los revestimientos protectores contra el óxido, por lo tanto, puede ayudar a garantizar la durabilidad de las piezas, ahorrando dinero y ahorrando nuevas compras de reemplazo para equipos costosos.

¿Cómo eliminar el óxido de forma eficiente?

Un proceso industrial antioxidante eficaz incluiría idealmente un proceso de limpieza previa de las piezas mecánicas, los componentes y las herramientas, que suelen estar cubiertos de grasa y polvo. Una limpieza de este tipo puede incluir tratamientos superficiales especiales para reducir el riesgo de oxidación cuando las piezas se secan.

Eliminar el óxido de las piezas metálicas es una tarea complicada, especialmente cuando la superficie de la pieza no es plana.

Afortunadamente, existen muchas soluciones actuales para desoxidar y desengrasar las piezas metálicas:

  • Métodos de limpieza química que utilizan baños llenos de cosas como ácido fosfórico o clorhídrico
  • Procesos mecánicos como el chorro de arena, el granallado o el cepillado y pulido mecánicos
  • Industrial parts washers using specially formulated detergents and/or ultrasound

 

Eliminación química del óxido

Un proceso desoxidante químico a base de ácido fosfórico, ácido clorhídrico o sosa cáustica puede eliminar el óxido fácilmente, pero presenta muchos riesgos, tanto para los operarios como para las piezas.

Estos productos detienen la oxidación y eliminan el óxido, pero son muy corrosivos e irritan la piel, los ojos, el sistema respiratorio y el tracto digestivo. La mejor práctica es consultar las Fichas de Datos de Seguridad (FDS) de los productos antes de manipularlos o utilizarlos. También son peligrosos para el medio ambiente, en particular para los entornos acuáticos, ya que aumentan el pH de los cursos de agua y pueden dañar tanto la flora como la fauna.

Incluso pueden dañar el material que se limpia, en particular cuando las superficies están finamente mecanizadas o tienen un acabado preciso.

Limpieza mecánica del óxido

Los métodos mecánicos para eliminar el óxido son los más utilizados para la limpieza de piezas y componentes metálicos, pero pueden requerir mucho tiempo y trabajo.

Los más comunes son el chorro de arena y el granallado. Estos métodos de limpieza de piezas basados en el chorreado deben ser realizados manualmente por un operario formado, requieren un suministro constante de material de limpieza de un solo uso (medios de chorreado) y exponen a los operarios a riesgos respiratorios asociados al polvo generado y dispersado en el aire.

Los daños durante la limpieza también son un riesgo. El chorreado abrasivo de alta presión puede provocar la aparición de graves picaduras en la superficie del metal que se está limpiando, mientras que las técnicas que utilizan papel de lija o cepillos radiales pueden dejar rastros de surcos en el metal. Además, estos procesos a menudo deben ir seguidos de un pulido intensivo para conseguir un acabado satisfactorio.

Eliminación del óxido con lavadoras de piezas industriales

Rápidas, sencillas y eficaces, las máquinas de limpieza de piezas industriales pueden eliminar el óxido de las piezas metálicas con la misma eficacia con la que limpian la grasa y el polvo.

Las máquinas de ultrasonidos son la mejor solución para desengrasar y eliminar completamente el óxido, preservando incluso las piezas metálicas más delicadas y complicadas. Las ondas de ultrasonido crean variaciones de presión al pasar por el líquido. Éstas producen millones de pequeñas burbujas microscópicas que estallan al entrar en contacto con los artículos que se limpian, liberando una gran cantidad de energía que hace que las partículas de óxido se desprendan de la superficie, y generando un movimiento en el líquido que ayuda a separar los residuos del artículo limpiado.

Una vez cargadas con las piezas a limpiar, estas máquinas funcionan automáticamente con programas preestablecidos que liberan a los operarios de otras tareas importantes, al tiempo que garantizan resultados de limpieza constantes de una carga a otra.

Las socluciones de Safetykleen para eliminar el óxido

El mantenimiento regular puede ayudar a ralentizar la acumulación de óxido, por lo que tanto nuestras lavadoras de piezas manuales de alta presión como nuestras lavadoras de piezas automáticas pueden actuar como primera etapa de la eliminación del óxido. Nuestras soluciones de servicio incluyen máquinas adecuadas para una amplia gama de tamaños de piezas. Las combinamos con detergentes de limpieza de alto rendimiento especialmente formulados para evitar la oxidación instantánea.

Cuando se trata de eliminar el óxido acumulado, ofrecemos un enfoque de inmersión sin electricidad para eliminar el óxido que ofrece resultados extraordinarios sin prácticamente la participación del operario, y limpiadores ultrasónicos que añaden el rendimiento de limpieza de precisión de los ultrasonidos a ese enfoque de inmersión para abordar incluso las formas más intrincadas de los componentes.

Nuestros productos para eliminar el óxido

Nuestras máquinas de limpieza de óxido se combinan con detergentes desoxidantes especiales a base de agua que no contienen COV (compuestos orgánicos volátiles) para eliminar rápida y eficazmente todo el óxido de sus piezas metálicas.

Eliminación pasiva del óxido

Nuestros tanques de inmersión Rustkleen le permiten eliminar el óxido sumergiendo las piezas en un baño lleno de una solución especial de limpieza a base de agua. Simplemente cargue las piezas que desea limpiar en el baño y deje que el detergente haga su trabajo. No se necesita electricidad, la mano de obra es mínima y no hay peligro de dañar el material subyacente al óxido.

Limpiador de óxido por ultrasonidos

Para obtener mejores niveles de rendimiento de limpieza, nuestras máquinas Rustkleen Ultra son la solución ideal. Hasta 10 veces más rápidas que los enfoques tradicionales para eliminar el óxido, ofrecen tiempos de limpieza más cortos y ciclos de limpieza automatizados para que su equipo pueda dedicarse a otras tareas.

Líquidos para eliminar el óxido

Nuestros dos enfoques de limpieza de óxido utilizan una solución química personalizada a base de agua, no corrosiva, no tóxica y sin COV. Esta solución se dirige a la eliminación del óxido, manteniendo intactas las partes finas o pintadas de los componentes. Rompe suavemente las moléculas de óxido y las levanta de la superficie de la pieza para que puedan ser enjuagadas fácilmente después de la limpieza.

Preguntas frecuentes para eliminar el óxido

Quelle est la différence entre corrosion et oxydation ?

La corrosion se définit comme le résultat de la détérioration d’un matériau lorsque les atomes de métal à la surface d’un métal s’oxydent en présence d’oxygène et d’eau. L’oxydation est une décomposition électrochimique du métal due à son exposition avec l’oxygène et l’eau. La corrosion est donc un type d’oxydation.

Quel revêtement pour prévenir la réapparition de la rouille ?

Le choix du revêtement pour prévenir de la rouille est déterminant afin de réduire les coûts de maintenance d’entretien et ceux de remplacement. Il doit se faire en fonction des applications spécifiques des pièces métalliques et les conditions auxquelles elles sont exposées afin de les protéger durablement.

Les revêtements temporaires à base d’huile et de graisse de stockage permettent de protéger les pièces pendant une courte période, en général pour leur transport.
Les revêtements permanents, même s’ils sont plus coûteux, permettent de prolonger encore plus la durée de vie des pièces en métal. On y trouve des méthodes qui consistent à recouvrir la pièce d’une couche de métal, qui va isoler la pièce des contacts avec l’air et l’eau, tels que :

  • Le revêtement non réactif, d’une couche d’oxydation dite passivant : avec l’étain (surtout dans l’agroalimentaire), le chrome et le cadmium
  • Le revêtement réactif : avec le zinc quand il est oxydé, on dit alors que l’acier est galvanisé

On trouve enfin des revêtements tels que la peinture anti-corrosion, le vernis ou bien des méthodes d’intégration d’éléments d’alliage avec des aciers tels que l’acier Corten ou inoxydable.